Irse de hotel en el Camino de Santiago es más común de lo que piensas, peregrino.
Es cierto que la tradición y lo más habitual en nuestros días es pernoctar en los famosos albergues, pero desde los noventa hasta ahora la práctica de pasar alguna noche durante la ruta en un hotel se ha extendido por peregrinos de todos los rincones del mundo.
Alojamientos en el Camino de Santiago
Que haya hoteles no quiere decir que sean la única opción junto a los albergues de toda la vida.
En el Camino de Santiago también te puedes quedar en casas de particulares que viven en pueblos localizados en alguna de las rutas que conducen a Santiago de Compostela. También puedes recurrir a hostales, a apartamentos, a apartamentos rurales y a hoteles en el campo, que contrastan con los hoteles urbanos.
VER TAMBIÉN: 5 Claves para elegir tu Hotel Rural
Y es que de camino hay un sinfín de lugares con una riqueza cultural enorme. Si vienes de muy lejos, ¿por qué no disfrutar el resto del día tras tu ruta para conocer todo lo que el sitio tenga para ofrecerte?
Y si te lo quieres tomar más con calma, incluso te puedes quedar dos noches en el mismo sitio o hacer algún tramo alternativo del Camino de Santiago. Antes de los noventa se supone que no debías hacerlo, pero ahora sí. Hay ciudades preciosas de camino a Santiago de Compostela.
En el Camino Francés, además, los entornos rurales son de escándalo cuando estamos a la altura del pirineo navarro.
¿Nuestra recomendación?
Que combines para verlo todo. Albergues, hostales, casas rurales, apartamentos, hoteles rurales y hoteles urbanos. Tienes kilómetros para aburrir; vas a encontrar noches de sobra para satisfacer tu curiosidad de cómo es quedarte en todos los tipos de alojamiento disponibles.
Las ventajas de quedarte en un hotel en el Camino de Santiago
Tienes todo tipo de alojamientos para elegir, pero hoy vamos a hablar de los hoteles.
¿Qué motivos te pueden impulsar a quedarte una o dos noches en un hotel?
No son pocos:
Alojarte en el centro de una ciudad
Es posible que en tu largo camino eches de menos en algún momento las comodidades de dormir en el centro: un supermercado cerca, un bar al lado del alojamiento, una farmacia, un buen desayuno, un menú copioso… E incluso salirte del ambiente del Camino.
En los albergues y hostales del Camino de Santiago lo más normal es que solo encuentres peregrinos. Las conversaciones varían de un día a otro, pero es innegable que la mayoría gira en torno a lo mismo. Irte a un hotel urbano te permitirá ver a gente ajena al Camino; un auténtico descanso cuando llevas muchos kilómetros en las piernas.
Dormir con intimidad
Sin duda, uno de los motivos más poderosos a la hora de elegir alojarse en un hotel cuando se está realizando la ruta hacia Santiago de Compostela.
En un hotel tienes habitaciones. Pagas por ellas, sí, pero disfrutarás de intimidad en todo momento. Cuando transcurren muchos días sin ella acabas echándola de menos.
Puedes reservar con antelación
Otro elemento clave. En épocas de verano, el Camino de Santiago Francés se llena de peregrinos en todos los albergues y hostales. Colas largas, tiempos de espera y algo de suerte para coger sitio. Como no se puede reservar, los albergues aceptan a las personas por orden de llegada.
La mayoría de los hostales también admite reservas, pero algunos no. Los hoteles, todos. Si quieres evitar sobresaltos durante una etapa por no llegar el último, las reservas de los hoteles te salvarán la jornada.
Reponer fuerzas y dormir con comodidad
El que hace el Camino no puede ser especialmente delicado. Las condiciones son duras y si se prolongan en el tiempo, más aún.
Por eso, el poder descansar bien entre jornada y jornada es importante. No todos tienen la misma capacidad de adaptarse a las superficies en las que duermen, y por ello alojarse en un hotel en el Camino de Santiago también puede garantizar el descanso profundo.
Imagina llegar tras 130 km durmiendo en albergues o refugios a un hotelito de lo más apañado. Una habitación espaciosa para ti, con baño propio. Bañera, intimidad, un restaurante con carta, etc. Y luego te vas a dormir y… Un fantástico colchón, perfectamente cuidado, para que tu espalda descanse como nunca desde que saliste de casa hace varias jornadas.
Esa sensación no se puede imaginar; hay que sentirla de verdad para saber de lo que estamos hablando.
Conocer la geografía de la zona
En los hoteles rurales te garantizan las mismas comodidades que en los urbanos, pero ubicándote en un entorno rústico lleno de encanto.
Si te decides por hacer un stop y empaparte de todo lo que rodea al hotel, puedes llevarte más de una, dos y tres sorpresas agradables. Muchos tienen servicio de turismo activo que además de hacer deporte y contactar con la naturaleza son actividades muy divertidas.
¿Has estado por el norte de Navarra, por ejemplo?
El Valle de Esteríbar es espectacular. Con el bosque del Quinto Real, con sus pueblos y sus casitas. El río Arga, la gastronomía local… y un sinfín de rutas de senderismo, de bicicleta de montaña o de cicloturismo en carretera.
Zubiri es parada obligada si pasas por el Valle. Es muy habitual cuando se hace el Camino por etapas.
Si quieres quedarte un par de noches para ver la zona, no dudes en pasarte por Eugi, el pueblecito donde se ubica nuestro Hotel Quinto Real, preparado para todos los peregrinos que quieran pernoctar con nosotros.
Damos todas las facilidades, tales como servicio de guía entre San Juan de Pie de Port hasta Pamplona o, si lo prefieres, transporte hasta el inicio y desde el final de cada una de las tres etapas de las que se compone el tramo.
Y sin duda, toda la información que puedas requerir, así como opciones de ocio y turismo activo por la zona. El Valle es el lugar perfecto para hacer excursiones a pie o en bicicleta de montaña.
Cuando vengas seguro que te apetece quedarte más tiempo, pero el Camino espera. ¡Te despediremos con un fuerte abrazo esperando verte de vuelta cuanto antes!
Para terminar, ¿nos contarías alguna anécdota divertida que te haya sucedido en el Camino de Santiago? Si lo has hecho ya, claro. Si no, ¿a qué esperas?
¡Tú puedes!
Irse de hotel en el Camino de Santiago es más común de lo que piensas, peregrino.
Es cierto que la tradición y lo más habitual en nuestros días es pernoctar en los famosos albergues, pero desde los noventa hasta ahora la práctica de pasar alguna noche durante la ruta en un hotel se ha extendido por peregrinos de todos los rincones del mundo.
Alojamientos en el Camino de Santiago
Que haya hoteles no quiere decir que sean la única opción junto a los albergues de toda la vida.
En el Camino de Santiago también te puedes quedar en casas de particulares que viven en pueblos localizados en alguna de las rutas que conducen a Santiago de Compostela. También puedes recurrir a hostales, a apartamentos, a apartamentos rurales y a hoteles en el campo, que contrastan con los hoteles urbanos.
VER TAMBIÉN: 5 Claves para elegir tu Hotel Rural
Y es que de camino hay un sinfín de lugares con una riqueza cultural enorme. Si vienes de muy lejos, ¿por qué no disfrutar el resto del día tras tu ruta para conocer todo lo que el sitio tenga para ofrecerte?
Y si te lo quieres tomar más con calma, incluso te puedes quedar dos noches en el mismo sitio o hacer algún tramo alternativo del Camino de Santiago. Antes de los noventa se supone que no debías hacerlo, pero ahora sí. Hay ciudades preciosas de camino a Santiago de Compostela.
En el Camino Francés, además, los entornos rurales son de escándalo cuando estamos a la altura del pirineo navarro.
¿Nuestra recomendación?
Que combines para verlo todo. Albergues, hostales, casas rurales, apartamentos, hoteles rurales y hoteles urbanos. Tienes kilómetros para aburrir; vas a encontrar noches de sobra para satisfacer tu curiosidad de cómo es quedarte en todos los tipos de alojamiento disponibles.
Las ventajas de quedarte en un hotel en el Camino de Santiago
Tienes todo tipo de alojamientos para elegir, pero hoy vamos a hablar de los hoteles.
¿Qué motivos te pueden impulsar a quedarte una o dos noches en un hotel?
No son pocos:
Alojarte en el centro de una ciudad
Es posible que en tu largo camino eches de menos en algún momento las comodidades de dormir en el centro: un supermercado cerca, un bar al lado del alojamiento, una farmacia, un buen desayuno, un menú copioso… E incluso salirte del ambiente del Camino.
En los albergues y hostales del Camino de Santiago lo más normal es que solo encuentres peregrinos. Las conversaciones varían de un día a otro, pero es innegable que la mayoría gira en torno a lo mismo. Irte a un hotel urbano te permitirá ver a gente ajena al Camino; un auténtico descanso cuando llevas muchos kilómetros en las piernas.
Dormir con intimidad
Sin duda, uno de los motivos más poderosos a la hora de elegir alojarse en un hotel cuando se está realizando la ruta hacia Santiago de Compostela.
En un hotel tienes habitaciones. Pagas por ellas, sí, pero disfrutarás de intimidad en todo momento. Cuando transcurren muchos días sin ella acabas echándola de menos.
Puedes reservar con antelación
Otro elemento clave. En épocas de verano, el Camino de Santiago Francés se llena de peregrinos en todos los albergues y hostales. Colas largas, tiempos de espera y algo de suerte para coger sitio. Como no se puede reservar, los albergues aceptan a las personas por orden de llegada.
La mayoría de los hostales también admite reservas, pero algunos no. Los hoteles, todos. Si quieres evitar sobresaltos durante una etapa por no llegar el último, las reservas de los hoteles te salvarán la jornada.
Reponer fuerzas y dormir con comodidad
El que hace el Camino no puede ser especialmente delicado. Las condiciones son duras y si se prolongan en el tiempo, más aún.
Por eso, el poder descansar bien entre jornada y jornada es importante. No todos tienen la misma capacidad de adaptarse a las superficies en las que duermen, y por ello alojarse en un hotel en el Camino de Santiago también puede garantizar el descanso profundo.
Imagina llegar tras 130 km durmiendo en albergues o refugios a un hotelito de lo más apañado. Una habitación espaciosa para ti, con baño propio. Bañera, intimidad, un restaurante con carta, etc. Y luego te vas a dormir y… Un fantástico colchón, perfectamente cuidado, para que tu espalda descanse como nunca desde que saliste de casa hace varias jornadas.
Esa sensación no se puede imaginar; hay que sentirla de verdad para saber de lo que estamos hablando.
Conocer la geografía de la zona
En los hoteles rurales te garantizan las mismas comodidades que en los urbanos, pero ubicándote en un entorno rústico lleno de encanto.
Si te decides por hacer un stop y empaparte de todo lo que rodea al hotel, puedes llevarte más de una, dos y tres sorpresas agradables. Muchos tienen servicio de turismo activo que además de hacer deporte y contactar con la naturaleza son actividades muy divertidas.
¿Has estado por el norte de Navarra, por ejemplo?
El Valle de Esteríbar es espectacular. Con el bosque del Quinto Real, con sus pueblos y sus casitas. El río Arga, la gastronomía local… y un sinfín de rutas de senderismo, de bicicleta de montaña o de cicloturismo en carretera.
Zubiri es parada obligada si pasas por el Valle. Es muy habitual cuando se hace el Camino por etapas.
Si quieres quedarte un par de noches para ver la zona, no dudes en pasarte por Eugi, el pueblecito donde se ubica nuestro Hotel Quinto Real, preparado para todos los peregrinos que quieran pernoctar con nosotros.
Damos todas las facilidades, tales como servicio de guía entre San Juan de Pie de Port hasta Pamplona o, si lo prefieres, transporte hasta el inicio y desde el final de cada una de las tres etapas de las que se compone el tramo.
Y sin duda, toda la información que puedas requerir, así como opciones de ocio y turismo activo por la zona. El Valle es el lugar perfecto para hacer excursiones a pie o en bicicleta de montaña.
Cuando vengas seguro que te apetece quedarte más tiempo, pero el Camino espera. ¡Te despediremos con un fuerte abrazo esperando verte de vuelta cuanto antes!
Para terminar, ¿nos contarías alguna anécdota divertida que te haya sucedido en el Camino de Santiago? Si lo has hecho ya, claro. Si no, ¿a qué esperas?
¡Tú puedes!